Este lugar es uno de los que forzosamente tienes que visitar si te encuentras en la ciudad de
Nueva York, lo que muchos no saben es que esta fue un regalo por parte de los franceses a estados unidos en 1886.
Uno de los atractivos de este lugar es su mirador situado en la corona de esta bella estatua, cabe mencionar que para poder disfrutar este paseo suele ser mejor durante las mañanas porque hay un gran número de personas que también desean visitar este lugar aparte así tendrás más tiempo para admirar su belleza, ya en el mirador tendrás la oportunidad de observar los rascacielos de la ciudad así como el lago que rodea la isla desde una altura de alrededor de 40 metros.
Para llegar a la isla donde está situada la
estatua es necesario tomar un barco, los cuales empiezan a operar desde las 8:30am y el último barco de regreso sale a las 4:30pm, está abierto todos los días del año excepto el 25 de diciembre.